lunes, mayo 14, 2012
|
Imaginen el siguiente escenario: Dos amigos están parados a un metro de distancia uno del otro, sobre una plataforma. Las dos plataformas están conectadas con un cable a un interruptor. Cuando el interruptor se dispara este envía una señal a ambas plataformas y ambos de tus amigos saltan al aire simultáneamente.
Si te preguntan cuál de tus dos amigos ("A" o "B") saltó primero, dirás sin la menor duda en tu mente que ambos saltaron al mismo tiempo. Incluso, si revisas un video que grabaste del evento también podrás confirmar, en cámara lenta incluso, que efectivamente ambos saltaron exactamente al mismo tiempo. Pero, ¿y si les dijera que exactamente el mismo tipo de experimento (es decir, que ambos salten desde que reciben la señal del interruptor), bajo circunstancias extremas produce resultados muy diferentes a esto? Es decir, hablo de que bajo un escenario (que explicaré a continuación) es posible que tu veas con tu propios ojos (e incluso grabes en video) que uno de tus amigos saltó primero, y no solo que saltó primero, sino que incluso varios segundos antes. ¿Cómo es eso posible? Pues respondiendo la pregunta de hoy veremos como... Pero antes de continuar, recomiendo lean el artículo de la semana pasada titulado "Pregunta a eliax: ¿Cómo es eso de que al ver las estrellas vemos el pasado?", pues el artículo de hoy puede considerarse una extensión o continuación de ese otro. ¿Ya regresaron de leer ese otro artículo? Pues bien, continuemos... Iniciemos haciendo una modificación al escenario que describí al inicio de este artículo. En vez de que tus dos amigos A y B estén a 1 metro de distancia, vamos a colocarlos a 3 millones de kilómetros de distancia, uno al lado de otro, ambos mirándote de frente a ti, que para simplificar el ejemplo vamos a asumir que también estás a 3 millones de km de distancia de cada uno de ellos (o en otras palabras, imaginemos un triángulo perfecto, en donde en una esquina estás tu, y en las otras dos esquinas están tus amigos A y B). De paso vamos a asegurarnos de poner el interruptor justo en el medio de ambos, con un cable que llegará 1.5 millones de kilómetros hasta A, y 1.5 millones de km hasta B. Ahora reiniciemos el experimento igual que antes: El interruptor se dispara, y asumamos que por los cables vuela la electricidad a la velocidad de la luz en direcciones opuestas hasta tu amigo A en un extremo, y tu amigo B en el otro extremo. Cuando las plataformas sobre las cuales ambos están parados reciben la señal, ambos saltan. ¿Qué sucedió ahora? Pues fui cuidadoso en preparar el experimento para que lo que suceda ahora sea (por el momento) exactamente igual a lo que sucedió anteriormente: Tu ves a ambos saltar, e incluso grabas en video que ambos saltaron. Pero entremos ahora a la parte curiosa... ¿Qué sucedería si dejamos a tu amigo "A" exactamente en el mismo lugar en relación a ti (es decir, 3 millones de km de distancia tu de él), pero movemos a tu amigo "B" hacia atrás, alejado de tí ahora 6 millones de km de distancia (pero manteniendo el interrupto a exactamente la mitad del camino entre A y B)? A simple vista esto aparentaría que no cambiaría nada, pero si leyeron al artículo anterior que les referí al inicio, ya se podrán imaginar que este cambio inocente de distancia cambiará drásticamente los resultados... Sucede que la velocidad de la luz es de 300,000 kilómetros por segundo, por lo que si tu amigo "A" está a 3 millones de kilómetros de distancia eso significa que su luz tarda 10 segundos en llegarte. O en otras palabras, cuando él salte, tardarás 10 segundos en notar que él saltó. Pero (y esta es la parte interesante), tu amigo "B" está ahora a 6 millones de km de distancia, por lo que la luz tardará 20 segundos en llegar a tu ojos. Eso significa que aunque el interruptor envió una señal a ambos amigos para que saltaran, que bajo este nuevo esquema tu verás a tu amigo "A" saltar primero, ¡y después verás a tu amigo "B" saltar 10 segundos después! Y noten que incluso si grabamos el evento en una video-cámara, e incluso si captamos todo esto con un super-potente telescopio, que el resultado sería exactamente igual: Verás que tu amigo "B" saltó 10 segundos después que "A". Pero he aquí algo incluso más curioso: Si llega un nuevo amigo tuyo "C" y se coloca al lado extremo del experimento (es decir, más cerca de "B" que de "A"), ¡ese amigo tuyo verá con sus ojos a "B" saltar primero que "A" (debido a que le llega la luz de B primero)! En otras palabras, aunque supuestamente "A" y "B" saltaron "al mismo tiempo", tu ves a "A" saltar primero que "B", pero tu amigo "C" ve a "B" saltar primero que "A", y no hablamos de "un poco tiempo después", hablamos de 10 largos segundos después, en donde no cabe margen de duda de lo que vieron o grabaron con sus cámaras. Eso, es asombroso, y va en contra de toda intuición humana, pues hablamos de que exactamente el mismo evento es percibido de formas totalmente distintas por observadores distintos, y es precisamente a eso que Einstein se refería cuando decía que los eventos son relativos al observador. Y si se preguntan ¿pero quien tiene la razón? Es decir, ¿saltaron o no al mismo tiempo "A" y "B"? La respuesta a eso es "depende, todo es relativo". Si tu dices que fue "A" que saltó primero, estás 100% en lo correcto en relación a tí mismo, pero si tu amigo "C" dice que "B" saltó primero, él también está 100% en lo correcto en relación a sí mismo. O en otras palabras, no existen "absolutos". Por más que queramos imaginarnos el experimento que describí de ambos saltar "simultaneamente", esa forma de pensar en términos absolutos es errada, y no equivale a la realidad. Lo que sucede es que como los humanos evolucionamos y vivimos en un entorno en donde nunca experimentamos sucesos a vastas distancias o a altas velocidades (o de formas minúsculas como en la Mecánica Cuántica), nuestros cerebros se han condicionado (o más bien dicho, pre-programado) a captar la naturaleza de forma aproximada, y errónea. Noten que por el otro lado de la moneda es importante destacar que aunque en ciertas escalas percibimos al mundo de forma equivocada, que en nuestras vidas cotidianas el efecto de eso es prácticamente nulo, debido precisamente a que nuestros automóviles, o incluso aviones, viajan a velocidades monumentalmente por debajo del límite de la velocidad de la luz. Estos temas usualmente solo son relevantes a la hora de entender la realidad, o entender y calcular procesos cósmicos, y a menor escala en aplicaciones locales como el sistema de posicionamiento satelital global (GPS) en donde si no se toman en cuanta estas cosas los datos serían inexactos. Así que como ven, no todo es lo que parece... autor: josé elías |
41 comentarios |
Ciencia , Curiosidades , Educación , Pregunta a eliax , Tecnología Visual |
Comentarios
Añadir Comentario |
"la verdad te digo que desde que descubrí tu blog, mi forma de ver el mundo que nos rodea cambio de una forma rotunda, me has hecho entender muchas cosas que antes pasaban desapercibidas, eres una persona maravillosa y algún día me gustaría estrechar tu mano, saludos con cariño un fan mas desde san Cristóbal, Rep. Dom."
en camino a la singularidad...
©2005-2024 josé c. elías
todos los derechos reservados
como compartir los artículos de eliax
Seguir a @eliax
Para hacer esto mas cercano a nuestra realidad cotidiana, el mismo ejemplo seria posible con el sonido a escalas de distancia mas humanas :D